Por Mariana Sánchez

Deslocalización

La deslocalización se ha convertido en una estrategia clave para muchas empresas globales que buscan optimizar sus costos y mejorar su competitividad. A continuación, analizaremos las causas, tipos e impactos de la deslocalización en el entorno económico actual.

¿Qué es la deslocalización?

La deslocalización se refiere al proceso mediante el cual una empresa traslada parte o la totalidad de sus operaciones productivas o de servicios a otro país. 

Esto se hace con el objetivo de aprovechar las ventajas que ofrecen otras regiones, como mano de obra más barata, menores costes de producción o regulaciones menos estrictas. 

Es una estrategia utilizada por muchas empresas para mantenerse competitivas en mercados globales, reduciendo costes y aumentando su rentabilidad.

Causas de la deslocalización

Examinemos las causas de la deslocalización.

Reducción de los costos laborales

Una de las principales razones para la deslocalización industrial es el coste de la mano de obra. Las empresas buscan países con nóminas más bajas para producir a un menor coste, lo que aumenta su ventaja competitiva. 

Por ejemplo, sectores como el desarrollo de software suelen trasladarse a países con mano de obra más barata para maximizar sus márgenes de beneficio.

Ventajas fiscales y regulaciones menos estrictas

Otro motivo común es la búsqueda de países que ofrezcan ventajas fiscales. Muchas empresas optan por países donde los impuestos son más bajos o las regulaciones laborales y ambientales son menos exigentes.

Acceso a nuevos mercados y recursos

La deslocalización también puede ser una vía para acceder a nuevos mercados. Al establecer operaciones en un país diferente, las empresas pueden estar más cerca de los consumidores locales, lo que les permite optimizar sus cadenas de suministro. 

Además, algunas regiones ofrecen recursos naturales o tecnológicos que facilitan la producción a un menor coste.

Tipos de deslocalización

Existen diferentes tipos de deslocalización. Los examinaremos a continuación:

  • Deslocalización productiva. La deslocalización productiva ocurre cuando una empresa traslada el proceso de fabricación a otro país, normalmente en busca de menores costes de producción. Este tipo de deslocalización es común en industrias como la automotriz, la textil y la electrónica, donde los márgenes de beneficio dependen en gran medida de los costes de fabricación.
  • Deslocalización de servicios. La deslocalización de servicios implica el traslado a otro país de actividades no relacionadas con la producción, como la atención al cliente, la administración o incluso el desarrollo de software. Esto ha sido particularmente popular en sectores como las telecomunicaciones y los servicios financieros.

Outsourcing vs. offshoring

El outsourcing y el offshoring son dos conceptos relacionados con la deslocalización. El outsourcing implica contratar a terceros para realizar funciones específicas de la empresa, mientras que el offshoring es el traslado de esas actividades a otro país, a menudo con mano de obra más barata. 

Ambas son formas de deslocalización, pero difieren en el control y la ubicación de las operaciones.

Impacto de la deslocalización de las empresas

La principal ventaja de la deslocalización es la reducción de costes, lo que permite a las empresas ser más competitivas en el mercado global. 

Al trasladar sus operaciones a países con menor coste de mano de obra, las empresas pueden ofrecer productos a precios más competitivos, lo que mejora sus márgenes de beneficio.

Riesgos asociados, como la pérdida de control y calidad

Sin embargo, la deslocalización también conlleva riesgos, como la pérdida de control sobre la calidad del producto o servicio.

La distancia física y cultural entre la sede central y las instalaciones en otras ubicaciones puede dificultar la supervisión adecuada, lo que afecta a la consistencia y la calidad del producto final.

Efectos de la deslocalización en los países de origen

Uno de los mayores impactos negativos de la deslocalización en los países de origen es el desempleo. Al trasladar operaciones a países con mano de obra más barata, se pierden empleos en la nación original, lo que afecta negativamente a la fuerza laboral y a la economía local.

La deslocalización industrial puede tener efectos devastadores en el tejido empresarial local. Ciudades y regiones que dependen de una industria en particular pueden verse gravemente afectadas por el cierre de fábricas o la reducción de actividades económicas, lo que empeora el nivel de vida de los trabajadores.

Efectos de la deslocalización en los países de destino

Existen diferentes efectos de la deslocalización en los países de destino. Los examinaremos a continuación.

  • Creación de empleo y desarrollo económico. Por otro lado, los países que reciben a las empresas deslocalizadas se benefician de la creación de empleo. Esto impulsa el desarrollo económico local, mejora el acceso a nuevos recursos y genera oportunidades para los trabajadores de estas regiones.
  • Desafíos laborales y ambientales. Sin embargo, en los países de destino también surgen desafíos laborales. A menudo, las condiciones de trabajo no son tan favorables como en los países de origen, y las regulaciones ambientales pueden ser menos estrictas, lo que lleva a un aumento en la explotación de los recursos naturales y a problemas de sostenibilidad ambiental.
  • Cambios en la estructura económica y social. La llegada de empresas multinacionales puede cambiar radicalmente la estructura económica y social de un país al introducir inversiones, crear empleo y promover la transferencia de tecnología. 

Casos de estudio de deslocalización. 

Algunos ejemplos de deslocalización han generado un gran impacto global. Por ejemplo, empresas como Apple y Samsung han deslocalizado gran parte de su producción a países como China y Corea del Sur, donde el coste de la mano de obra es más bajo. 

Estos movimientos han permitido a las empresas mantenerse competitivas, pero también han generado controversias debido a las condiciones laborales y ambientales en los países receptores.

Medidas para mitigar los efectos negativos de la deslocalización

Los gobiernos pueden implementar políticas para mitigar los efectos negativos de la deslocalización, como incentivos fiscales para mantener empresas en el país o regulaciones más estrictas para las empresas que deslocalizan sus operaciones.

Las empresas que se deslocalizan también pueden adoptar iniciativas de responsabilidad social corporativa, garantizando condiciones laborales justas y minimizando el impacto ambiental en los países donde operan.

El proceso de reskilling y de upskilling de la fuerza laboral es esencial para que los trabajadores afectados por la deslocalización puedan adaptarse a nuevos roles. 

Estas estrategias permiten a los trabajadores adquirir nuevas habilidades y encontrar oportunidades en sectores emergentes.

El futuro de la deslocalización

Las tendencias actuales apuntan hacia una mayor diversificación de la deslocalización, con empresas que buscan países más cercanos (conocido como nearshoring) para reducir los riesgos asociados a las largas distancias.

La automatización reduce la necesidad de deslocalizar actividades a países con mano de obra barata, ya que las empresas pueden automatizar procesos sin necesidad de depender de grandes plantillas. 

A su vez, el nearshoring permite a las empresas trasladar sus operaciones a países más cercanos, lo que facilita el control y reduce los riesgos asociados.

Conclusión

La deslocalización seguirá siendo una estrategia utilizada por muchas empresas en busca de competitividad, pero es importante que tanto empresas como gobiernos tomen medidas para mitigar sus efectos negativos.

Revisar cuidadosamente los beneficios y riesgos de este proceso será crucial para garantizar un desarrollo equilibrado y sostenible, tanto para los países de origen como para los países de destino.