La base imponible es un concepto muy común en materia fiscal que es sumamente importante entender antes de pagar tus impuestos o los de tu empresa. Por eso hemos creado una completa guía sobre el tema que te enseñará cómo se calcula, los tipos de bases imponibles, su importancia en el ámbito fiscal y mucho más. ¡Comencemos!

Contenido

¿Qué es la base imponible?

Antes de hacer cualquier cálculo es importante que conozcas a detalle qué es la base imponible. En esencia, consiste en la suma de todas las ganancias que tuvo una persona o empresa a las cuales se le puede aplicar un impuesto. 

Dicho de otra forma, es el importe neto con el cual se realizan los cálculos para saber cuánto dinero tienen que pagar los contribuyentes al estado. Mientras mayor sean las ganancias, mayor serán los impuestos. 

Al ser la base de la que parte todo el cálculo de impuestos, se puede decir que su importancia fiscal es innegable. Como empresa, cada año debes demostrar cuáles fueron las ganancias obtenidas según tu actividad económica y a partir de allí se determina la contribución a realizar. 

Características de la base imponible y cómo se aplica

La base imponible es la suma de todos los beneficios que tuvo una empresa durante el año fiscal. Aquí se incluyen todos los ingresos que obtienes por tus actividades económicas, por la venta de un producto o servicio, ganancias por alquileres o rentas inmobiliarias, intereses por préstamos, entre muchos otros. 

El cálculo básico consiste en sumar cada uno de los ingresos dinerarios o no dinerarios que tienes tú o tu empresa para luego conseguir cuál será la cuota tributaria que debes pagar. 

Ahora bien, la base imponible se necesita inevitablemente para la implementación de los siguientes impuestos: 

  • Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA);
  • Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF);
  • Impuesto de Sociedades;
  • Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). 

Es importante destacar que existen casos especiales en los que se aplican algunas deducciones a la base imponible, lo que reduce el dinero que se debe pagar de impuestos. Lo más recomendable siempre es consultar a un experto en materia fiscal que te pueda decir cuáles son las deducciones aplicables y tener una estimación directa de los beneficios a recibir.

La base imponible: su papel en el contexto de diversos conceptos fiscales

Por lo general los conceptos fiscales suelen causar confusión para aquellas personas que no están relacionadas con el tema. Muchas veces se confunde el término de base imponible con el tipo impositivo o con la base liquidable, pero todos tienen un concepto diferente. 

El tipo impositivo representa el porcentaje que se aplica directamente a la base imponible cuando se calculan los impuestos. Por ejemplo, en el caso del IVA, el tipo impositivo general es de 21 % para España.

La base liquidable, por su parte, representa la suma de todos los ingresos menos las deducciones aplicables para cada caso. Entonces, a partir de la base imponible se consigue la base liquidable luego de restar las deducciones o exenciones y es a partir de allí que se aplica el tipo impositivo para cada impuesto. 

Peso de los planes de retribución flexible en la base liquidable

Cuando hablamos del peso de los planes de retribución flexible nos referimos al impacto que tienen los planes de compensación flexible en la base sobre la cual se calculan los impuestos. Dichos planes permiten a los empleados elegir entre diferentes opciones de compensación, como recibir dinero en efectivo, bonos, días adicionales de vacaciones, entre otros beneficios.

El dinero recibido será de máximo 30% del salario bruto y se debe utilizar en productos exentos de IRPF, por lo que, aunque se aumenta la base imponible debido al ingreso adicional, al final no se tienen que pagar más impuestos. 

Exenciones y deducciones que influyen en el cálculo de la base imponible

Las exenciones representan una forma de beneficio fiscal en la que se omiten algunos ingresos de las personas para el cálculo la base imponible. Algo similar pasa con las deducciones, pero estas se basan en ciertos gastos que se realizan en el año. 

Naturalmente, estas reducciones inciden en el pago de impuestos que realizas al final del periodo fiscal. A continuación, te nombramos algunas exenciones y deducciones que debes conocer para el cálculo de la base imponible del IRPF: 

Exenciones

  • Prestaciones por desempleo
  • Planes de pensiones privadas
  • Ganancias por venta de vivienda habitual
  • Prestaciones por maternidad o paternidad 
  • Becas para estudiar
  • Donaciones a ONG 

Deducciones

  • Cuotas a la Seguridad Social
  • Gastos por pago de alquiler
  • Gastos por guarderías
  • Gastos por inversión en la vivienda habitual
  • Gastos de salud
  • Gastos de hipotecas

Cada uno de estos casos, si aplican, se restan directamente de la base imponible y el resultado será una reducción del monto que constituye la base liquidable a la cual se aplicarán los impuestos. Naturalmente, al tener una base menor, la cuota tributaria también se reduce considerablemente. 

¿Cómo se calcula la base imponible?

Cuando hablamos de materia fiscal, el cálculo de la base imponible es relativamente simple, aunque se tiene que realizar con mucho cuidado para no olvidar ningún ingreso importante. 

Primero que todo, se deben conocer cuáles son los ingresos o rentas gravables, es decir, los ingresos que se toman en consideración según el impuesto que debes pagar. Aquí es donde entra en juego la base imponible del ahorro y la base imponible general, ya que ambas se calculan considerando diferentes formas de ingresos. 

En el caso del IRPF, se suma el salario bruto, las rentas por inversiones, las ganancias por alquileres, entre otros, mientras que para el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales se consideran tanto las ganancias como las pérdidas que se tienen en la venta de un producto o servicio. 

Luego de tener la suma de todos los ingresos se restan las deducciones y exenciones que apliquen según el caso. Por ejemplo, en familias numerosas o que tienen familiares dependientes, se aplican deducciones importantes a la base imponible. 

Ejemplo del cálculo de la base imponible

Supongamos que se debe calcular la base imponible de un trabajador que tiene un salario bruto de 50 000 € y tiene ganancias por inversiones en la bolsa de 2000 €. La misma persona debe pagar 8000 € por alquiler cada año, tiene una discapacidad y gastos de salud por 10. 000 €.

En este caso, la base imponible se calculará así: 

Base imponible = Salario bruto + Ganancias por inversión - Gasto por alquiler - Deducción por discapacidad - Gastos por salud.

Base imponible = 50 000 € + 2000 € - 8000 € - 3000 € - 10 000 €.

Base imponible = 31 000 €. 

¿Qué importancia tiene la base imponible en el contexto de una factura?

La base imponible en una factura juega un papel fundamental para cualquier negocio o empresa, así como también para la persona que recibe la factura. En este caso, la base imponible se refiere al monto que se debe pagar por un producto o servicio sin incluir ningún impuesto, teniendo en cuenta que sólo se considera el IVAIRPF

Entonces, para calcular la base imponible tienes que sumar el costo de los productos o servicios que adquieras y restarle algún descuento en caso de estar disponible. Ahora bien, este es el procedimiento más simple, pero en la mayoría de las facturas te indican directamente el monto a pagar incluyendo los impuestos, por lo que el procedimiento de cálculo cambia un poco. 

¿Cómo calcular la base imponible de una factura con IVA?

Vamos a suponer que recibes una factura a pagar por un monto de 500 €, y dicho monto ya incluye el IVA. Para este caso, sabiendo que el porcentaje en España es del 21 % de IVA, el cálculo de la base imponible con IVA sería así: 

Base imponible = Total de la factura / (1 + IVA/100)

Base imponible = 500 € / (1 + 21/100)

Base imponible = 500 € / 1,21

Base imponible = 413,22 €

¿Cómo calcular la base imponible de una factura con IRPF?

Ahora bien, si consideramos que la misma factura de 500 € incluye IVA (según el tipo de IVA correspondiente) y la retención de IRPF, el cálculo de la base imponible se realizaría así: 

Base imponible = Total de la factura / (1 + IVA/100 - IRPF/100)

Base imponible = 500 € / (1 + 21/100 - 15/100)

Base imponible = 500 € / 1,06

Base imponible = 471,70 €

Conclusiones

Realizar el cálculo correctamente de la base imponible es fundamental al momento de hacer el pago de tus impuestos o los de tu empresa. Aunque el procedimiento es simple, debes tener mucho cuidado al momento de hacer la suma de todos los ingresos o rentas que recibes durante el año fiscal. 

Es sumamente importante que tengas registro de todos tus ingresos, pero también de tus gastos, ya que puedes recibir deducciones que bajaran considerablemente las contribuciones en impuestos. Siempre es recomendable tener la ayuda de expertos en el área tributaria para que puedas conocer todos los beneficios fiscales disponibles. Recuerda que mientras menor sea la base imponible, menos dinero tienes que pagar

Preguntas frecuentes

¿Se pueden deducir ciertos gastos de la base imponible?

Sí, una vez que calculas la base imponible se pueden aplicar algunas deducciones que se relacionan a algunos gastos que realices durante el año fiscal. En este sentido, se incluyen gastos por alquileres, gastos de salud, cuotas de Seguridad Social e hipotecas, entre otros. 

¿Cómo afectan los cambios en la base imponible a mis impuestos?

La base imponible es el punto de partida para el cálculo de los impuestos, por lo que, mientras más grande sea la base, mayor será la contribución que tienes que pagar. 

¿Existen exenciones que afectan a la base imponible?

Existen algunas exenciones que puedes conseguir y que disminuyen el monto final de la base imponible. Podemos destacar exenciones como las prestaciones por desempleo, por las ganancias por venta de vivienda habitual, las prestaciones por maternidad o paternidad, las donaciones a ONG, entre otras.

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